Cinco consejos de higiene dental básicos para mantener la salud bucodental; ¡no los pases por alto!
Los cuidados dentales que englobamos en el concepto de higiene son fundamentales para disfrutar de una salud de la boca en condiciones. Por lo general, aprendemos los buenos hábitos de higiene dental cuando somos pequeños, pero hemos de tener en cuenta que estos irán cambiando con el paso del tiempo. Igual que surgen nuevas amenazas para nuestra dentadura, aparecen también productos más sofisticados para hacerles frente. Por consiguiente, vale la pena que actualices constantemente tus prácticas de higiene dental. Además, recuerda que, si previenes las enfermedades de la dentadura, evitarás tener que combatirlas posteriormente mediante tratamientos que te resultarán, en todos los sentidos, más costosos. Para evitar que tu salud bucodental se resienta, te sugerimos que prestes atención a los siguientes consejos.
5 recomendaciones para prevenir enfermedades dentales
Toma nota de estas indicaciones básicas de higiene dental y, sobre todo, síguelas.
1. No falles cuando te cepilles los dientes
Tienes que hacerlo con un cepillo eléctrico y al menos tres veces al día. Utiliza la técnica Bass modificada y el dentífrico que tenga las características que mejor se adapten a las condiciones de tu boca. Cepillarte los dientes te servirá para que se desprenda el 60 % de los restos de comida acumulados. Estos pueden convertirse en focos de bacterias y generar la placa y el sarro. Por último, acuérdate de que no tienes que enjuagarte la boca cuando acabes de cepillarte. Si lo haces, reducirás los efectos de los principios activos de la pasta de dientes.
2. Realiza la limpieza interproximal
Para eliminar el 40 % de acumulaciones entre los dientes, tendrás que recurrir a los instrumentos (como los cepillos especiales, las cintas o sedas o los irrigadores) de limpieza interproximal. Te permiten llegar a las zonas más estrechas que se encuentran entre las piezas dentales.
3. No olvides el colutorio
Este producto líquido posibilita que los principios activos de la pasta dentífrica prolonguen sus efectos positivos sobre los dientes.
4. Las encías también cuentan
Efectivamente, como tejidos que dan soporte a los dientes, también son susceptibles de acumular residuos. De hecho, cuando se producen estas concentraciones, puede surgir la gingivitis. Y, en el caso de que su cuadro se complique, aparecerían los síntomas de la periodontitis. Unas encías saludables, después de cepillarte los dientes, no van a sangrar ni se verán inflamadas o enrojecidas. En todo caso, si esto sucede, utiliza dentífricos y colutorios formulados para cuidar específicamente de ellas.
5. También has de limpiar tu lengua
Mucha gente desconoce que resulta útil aplicar, después de haberte cepillado, un limpiador lingual sobre este órgano tan importante para tu día a día. Las bacterias que pueden alojarse en ella pueden acabar estando detrás de las próximas gingivitis o caries. Asimismo, están muy relacionadas con la molesta halitosis.
En definitiva, la higiene dental es la clave para conservar los dientes en un estado óptimo. Como medida que asegure su protección, no dejes que pasen más de seis meses sin acudir a nuestro odontólogo de confianza para que te realice una revisión dental.